Estáis y se agradece

2/4/11

Hojarascas de Otoños



Esta inmensidad me depara un gozo que censura mi pequeñez humana, ante lo sublime del regazo de la creación. ¿Por qué sentirme fruto de ella cuando soy parte de lo que me pertenece en sí misma;  por qué mirarse en ella de  la forma en que el mismo artista ve su obra reflejada fuera de sus manos aún siendo de ellas, estando tan orgulloso o clamado por los que lo halagan? 


En este caso no es así por ser diferente la situación en que  todos los demás nos hallamos. Somos parte del mismo hecho y tomamos de la misma forma un cometido que nos emparenta con una existencia común, como necesariamente  imprescindible en todas sus partes para ser, no un 'Yo' individual y sí un 'nosotros único´.

Por eso no soy el que se pierde y sí el perdido entre un `vosotros`. El solitario individuo de la mega metrópolis cosmológica, que mira alrededor sospechando de no ser más que voz en el ruido ininteligible.


No sé si estoy aquí, pero si hay alguien allí fuera, háganme saber que no estoy sola.
Francamente estoy asustada, pues debo ser algo más que nada.

2 comentarios:

  1. Yo estoy aquí y te leo así que existimos.....creo?

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  2. A veces parece que no es el comentario el que nos indica ser o estar, sino, otro tipo de convicciones que llevan un latido interior. Seguro que lo sabes.

    ¡Gracias amiga de las letras de sueños reales y ensoñaciones para sembrar de vida los campos yermos de camino!

    Nos seguimos. Mi cordial saludo.

    Elisa

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¡Gracias por tu visita! Se sincero siempre no necesitas para ello excederte, sólo estimular a quien lo hace bien. Juzga la labor tanto si es escrita como si es un dibujo o pintura de su autora si la hubiese. Muchas veces entramos a un sitio y no hallamos lo que queremos... Es como quien busca sin suerte y entra en un castillo cuya figura se yergue en el paisaje. Es hermoso ver e imaginar detrás de sus muros lo que hay; pero ya dentro no existe nada y todo ha desaparecido a través del tiempo y se adueña el cacío, están sólo sus muros llenos de tristeza y de sombras, entonces nos queda la imaginación para sentir que cada día mientras esté de pie la luz solar o el firmamento lo llenará de estrellas o de luna de su ayer. A veces somos así algunos seres humanos, como un recuerdo que se escapa dentro de nosotros hacia lo que no existe bajo su techo y sabe permanecer en el corazón de todo universo. Ranita.