Estáis y se agradece

28/7/11

Algo mío

Porque sé que razono desafíos
ante este mundo de distintas pieles,
velo sueños de incautos amoríos
enredando poemas por mis sienes.
Me sé sin importancia y me conformo
con la miel que producen las palabras,
con su magia pasmando por mi entorno
brillando como cuentas de esmeraldas.



Me regalo momentos y me embarga
una ilusión volando como grulla,
cualquier bosque interior, alguna charca
con su rana de cuento dando bulla.
Porque sé que razono en albedrío,
reflexiono la vida y luego callo;
a veces río, lloro o me hago un lío
busco sueños de ayer y no los hallo.

Algo mío ha quedado en la distancia
entre la niebla de las altas cumbres;
un vuelo prometido de mi infancia
con sus sueños ardiendo como lumbres.
Mas, hay algo tan mío y también duele
por saberse sin mí, sin esperanza.
Se ha quedado sin alma y ya no puede
describir tanto amor en lontananza

Elisa

2 comentarios:

  1. Muy hermoso leerte, regalarse momentos es quererse a sí misma y eso ya es muy importante, amiga. Un fuerte abrazo.

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  2. Ya lo dices, querida Julie, "regalarse momentos" ¡y si no cómo sentir precisamente lo que llena a algunas almas! Es que lo necesitamos a diario como una terapia que equilibra la vida y ella no es así tan llena de detalles, siempre 'está ocupada o ha perdido el entusiasmo de ser feliz', por eso esa dualidad versificando desde diferentes perspectivas, es tomar de nuestra energía de la propia esencia y es como estar fuera y dentro, en cielo y mar o ser brisa en la fronda de las ideas para soñar a ratos o, para sentirse vivo ante los que pierden la esperanza.

    Un abrazo.

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¡Gracias por tu visita! Se sincero siempre no necesitas para ello excederte, sólo estimular a quien lo hace bien. Juzga la labor tanto si es escrita como si es un dibujo o pintura de su autora si la hubiese. Muchas veces entramos a un sitio y no hallamos lo que queremos... Es como quien busca sin suerte y entra en un castillo cuya figura se yergue en el paisaje. Es hermoso ver e imaginar detrás de sus muros lo que hay; pero ya dentro no existe nada y todo ha desaparecido a través del tiempo y se adueña el cacío, están sólo sus muros llenos de tristeza y de sombras, entonces nos queda la imaginación para sentir que cada día mientras esté de pie la luz solar o el firmamento lo llenará de estrellas o de luna de su ayer. A veces somos así algunos seres humanos, como un recuerdo que se escapa dentro de nosotros hacia lo que no existe bajo su techo y sabe permanecer en el corazón de todo universo. Ranita.