pero interrumpe
a la mente que clama
y la confunde.
Ver la realidad
nunca sorprende
a la edad del amor
por ser rebelde.
¡Ah, que mente demente
jamás se opone,
caray, si me castigas
y hasta me tose!
Y mira quién lo dice
y quién censura,
llamando la atención,
me deja muda.
Ésta que escribe, ríe
y las perfila,
porque quiere hacer cinco
con seguidillas...
¡Qué bello ritmo llevan
cómo se siente;
dan ganas de bailarlas
pues llevan duende.
Ranita
Bonitas seguidillas llenas de alegría como siempre en ti querida Elisa.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz comienzo de semana.