Estáis y se agradece

26/4/10

Sin mi faro

Este trazo en el aire me sorprende
con su vuelo de ayer, ardor y fuego;
sobre tu rostro de hoja transparente
dibujando crepúsculos en cielos.
Estas manos se han hecho de ternuras
reposando a lo largo de los tiempos,
sobre el libro de vida que ellas toman
consumiendo el navío con su aliento..
Hiende mirada al mar, aires me bebo
con acento de verso enajenado,
pasando deslumbrado como un ave 
en alas de la voz que me ha dejado. 
Se escora la esperanza al estribor,
va vencida por vientos otoñales
y temo acantilado sin mi faro,
romperme para siempre por sus mares.


Elisa en: "Don Anselmo"
Ab/10

3 comentarios:

  1. ¿Cómo está mi Ranita preciosa? A veces no dejo comentarios, pero vengo por las noches a contemplar la Luna reflejada en tu charca. Calladita, de puntitas para no asustar a las haditas blancas volando en tus cabellos. Ah, sobre el hongo de la oruga te dejo un vasito de leche tibia y un beso con mermelada para que desayunes. Te quiero!!!

    ResponderEliminar
  2. Creo que me quedé dormida en una hoja de loto y un duende amarillo quiso tomar un sorbito y , hoy, el pobre se ha puesto blanco. Hemos llamado al hada Aniceta que tiene una peineta mágica, así le peina los rizos y vuelve a tomar el color que tenía, porque dice que no quiere perder sus poderes tomando leche de una extraña ¡Jajajaja! >Le dije que era para mí y que eso que le había pasado , era por ser mentiroso porque también me dejó sin mermelada. allí ya no le gustó que se lo dijera, pues no le gusta besar a las duendas humanas. Y he visto a un saltamontes relamerse los morros con tu beso. Así que me debes otro. Yo te doy dos y te dejo un cuenco de savia milagrosa.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Gracias por los dos besos y por el cuenco de savia sabia, jajajaja!!!
    Bay bay!!!!

    ResponderEliminar

¡Gracias por tu visita! Se sincero siempre no necesitas para ello excederte, sólo estimular a quien lo hace bien. Juzga la labor tanto si es escrita como si es un dibujo o pintura de su autora si la hubiese. Muchas veces entramos a un sitio y no hallamos lo que queremos... Es como quien busca sin suerte y entra en un castillo cuya figura se yergue en el paisaje. Es hermoso ver e imaginar detrás de sus muros lo que hay; pero ya dentro no existe nada y todo ha desaparecido a través del tiempo y se adueña el cacío, están sólo sus muros llenos de tristeza y de sombras, entonces nos queda la imaginación para sentir que cada día mientras esté de pie la luz solar o el firmamento lo llenará de estrellas o de luna de su ayer. A veces somos así algunos seres humanos, como un recuerdo que se escapa dentro de nosotros hacia lo que no existe bajo su techo y sabe permanecer en el corazón de todo universo. Ranita.