רשעות (La maldad)
Adusta va cada alma atormentada.
Por maldad en su tiempo que le amarga,
con su llanto la noche se estremece
y en el hábito del cuerpo se aletarga.
Un vacío recorre los suburbios
por los ríos de sangre efervescente...
No lo llena con guerras ni la parca
cuando acecha su sombra pestilente.
La mansión de su 'dios' tiene rendijas.
El altar de los santos enmudece,
la rosa de mi pecho sé que aroma
el pacto del Amor cuando amanece.
Con sigilo las ánimas vigilan...
Y será de su tiempo la avalancha,
la de lluvias y juicios tormentosos,
¡llevándola al infierno en su revancha!
El mal, siempre se queja de los otros,
nunca hace nada, siempre es inocente;
pero el tiempo madura y lo señala
¡y por fin se le acaba lo valiente!
No obstante, la maldad tiene sus gustos
por sentirse en su salsa muy segura;
degustando el estiércol que se come
al pretender poner su cara dura.
Elisa en: "Salambó"
siempre es buno tener cerca el dolor hoy decubri, que la seguridad es proporcional tu capacidad de conoserte a ti mismo cuales son tus debilidades y tus capasidades o talentos.
ResponderEliminarSí, querida visitante, es así. Pero no siempre quien no ha madurado lo suficiente, a pesar de tener muy buenos contenidos éticos y desenvolverse correctamente en esta sociedad, tiene todas las de ganar ante la astucia de las malas intenciones, que siempre parten del egoísmo ajeno para favorecer su realidad. Por lo tanto la lucha es desigual en muchos casos, por eso la denuncia de los hechos si son graves y agreden , no sólo a su/sus víctimas propicias, se denuncian antes de que el tejido social se pudra con esta lacra.
ResponderEliminarsólo así nos conoceremos del todo para demostrar que en lo contrario, somos indudablemente mejores. Un cordial saludo y gracias. Elisa.