Estáis y se agradece

18/1/11

Árbol interior (Escribiendo al Sentimiento)


Te diré que en este después de tantos días 

tengo retoños nuevos, 

que las nubes despejaron 
en ese afán de disolver la angustia 
pero siendo ramaje en lo alto. 
Con la esperanza foliar que se renueva y mezcla 
con el viento batiendo mis ideas, 
pero también con el compás de sentir 
la vida en mecedora. 

Sin embargo, a veces, me martiriza el tiempo 
con el delirio de disfrazarlo dibujando sonrisas; 
que no noten qué llevo ni qué pienso... 
¡Así, cuando te escribo, 
qué poco pesan las palabras por los versos! 

A veces, también, esta esperanza se arroja al vacío, 
bordea el temor asomada al precipicio... ¿Presiente? 
Me cuesta ver que sigues apuntándome en las sienes 
con tus dedos... y los ojos llenos de lágrimas. 


Si te dijera que los caminos tienen prisiones 
-¿me creerías?- y que en los pliegues del espíritu 
se aposenta la sed de todos los silencios... 
Seguro que dibujarías también sonrisas. 
-¡Recuerda que nos delataran los indiscretos 
capilares de las comisuras!- 

Sabes que tu boca me incitará a la mirada muda, 
a la evasiva palabra que en estos renglones 
la despojamos de vida y desnudamos, 
con esa dulzura febril del alma, tan necesaria. 
Hoy –lo sé- no he depositado la flor en tus manos, 
pero se estremecen las cuerdas insonoras de una garganta. 

Y en la catedral interior de este árbol que aún respira, 
que conoce de la savia del mundo, 
aún se escuchan los pasos de mis sueños, 
más no temas cuando sólo se alargarán mis dedos 
intentando secarte alguna lágrima; 
pero no podré permitirme el lujo de tenerlas 
cuando en el altar mayor de mi pecho... tú, te consagras. 
He sentido tu cuerpo doblegarse porque sabe,
Me conoce... ¡Yo sólo sé que ahora sé!

Sí, soy palabra en la boca, pero con un corazón apretujado. 
¡Antes, deseo que el sol me arda en las arenas 
quemándome este viejo músculo que aún late; 
que no me rompa la cita con el abismo, 
...cuando se abrace a la tierra. 

¡Oh, Dios mío, me han florecido todas las raíces! 



Elisa Lattke 
20-jul-08

2 comentarios:

  1. esta increible, ma da luz gracias

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  2. Gracias, Ranita hermosa, Ranita mágica, por compartirme tus cuentos, tus sueños y tantas flores nuevas.
    Un beso florido.

    P.D. Tan hermosa la hija como la mamá!!! Felicidades a las dos!

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¡Gracias por tu visita! Se sincero siempre no necesitas para ello excederte, sólo estimular a quien lo hace bien. Juzga la labor tanto si es escrita como si es un dibujo o pintura de su autora si la hubiese. Muchas veces entramos a un sitio y no hallamos lo que queremos... Es como quien busca sin suerte y entra en un castillo cuya figura se yergue en el paisaje. Es hermoso ver e imaginar detrás de sus muros lo que hay; pero ya dentro no existe nada y todo ha desaparecido a través del tiempo y se adueña el cacío, están sólo sus muros llenos de tristeza y de sombras, entonces nos queda la imaginación para sentir que cada día mientras esté de pie la luz solar o el firmamento lo llenará de estrellas o de luna de su ayer. A veces somos así algunos seres humanos, como un recuerdo que se escapa dentro de nosotros hacia lo que no existe bajo su techo y sabe permanecer en el corazón de todo universo. Ranita.