La virtud es la verdad de las realidades

"No juzgues a tu prójimo antes
 de encontrarte en su lugar." Talmud
Dibujo original de: alattkeva

En el día de las madres muchas paren desengaños. ...
Como mujeres de carne y hueso y humana condición
las hace vulnerables a todo dedo que las señala;
ellas son depósito y semilla de una vida soterrada
para todas las angustias, para todos los conflictos.

Inspiración del amor para necesidad en su medio
y muchos creen que ellas son los males del mundo.

 
Ya mayores las acompaña una profunda tristeza soñolienta
detrás de los muros de su esqueleto de otros tiempos,
allá donde fulgía la inspiración abriéndose paso entre los sueños.
hacia otra luz, la más pura virtud de las realidades humanas
cuando asumen responsabilidad siendo "fieles y castas"
...¡La Verdad!

Alguien juega al escondido con el dolor ajeno
creyéndose un demiurgo mientras se entretiene
elucubrando renglones zurdos que no se entienden.
La Virtud retoza con sus pensamientos...
La Realidades... no saben aún de las desventuras de las mentiras.
Sus falsedades están muy seguras y bien atadas
y como se aburren, las da por hurgarse la nariz.
¡Pegarán sus mocos asquerosos en cualquier cosa que las afecte!

Pero hay un momento en que la Verdad sacude las entrañas
y la comadrona ilusión, como siempre, llega tarde al parto;
pero eso sí, con su tour de force descifrando el rompecabezas
de todas las realidades nefastas con las que se alumbra la Vida.
Se limpiará las manos con toallitas húmedas... ¡Es muy moderna!
Sacándolas de su enorme bolso de justificaciones.

Cuesta romper aguas cada día, ¡incluso hasta a los hombres!
-¡Hasta en el Día de las Madres se lloran soledades interiores!
Se siente el Yo ingente de caricias en los sueño que acompañan.
-¡Y, el feto de la maldad, siempre escurriendo el bulto de quien lo pare!
¡Los inocentes siempre son los señalados, los culpables de todo!

Alguien sabe las Verdades de las realidades virtuosas, seguro,
pero conoce que ha fallado y estas pobres desgraciadas
se encogen de hombros, se esconden, callan y no se mojan.
(¡La verdad es cobarde e ingenua, la mentira procaz y osada!)

Este tiempo mío no es otro que el inicio de un mañana
donde todo se olvida, porque no existe la maldad en el alma
¡"Los imbéciles" inoportunos somos así de perdedores!
Hasta la muerte del ayer
parece un alivio en la recuperación,
para que el alma propia o, la ajena,
delibere sobre su prudencia con nobleza
porque ha de aguantar chuzos de punta sin protección,
aunque pida perdón, es una perdedora.
Esto no es más que otra ilusión
la más efímera por servir a la existencia
pariendo verdades.

El sol siempre ayuda a sentir otro sueño más...
a luchar por lo que se cree que debe nacer cada día
y es bueno para todos: la Esperanza del Amor.
Hay un algo que se conmueve debajo de los párpados.
y es que cada mañana el Amor de madre y de mujer
es el sol que ilumina la vida de los otros.
¡Ellas paren anhelos!
Y la incongruencia desconoce la lectura de sus entrañas,
porque parir sentimientos es un eterno embarazo
de partos múltiples nunca finitos.
¡Duele romper aguas!
...
Para qué pensar que con un aborto de realidades
se soluciona la existencia si se obvia el daño que se causa;
¡Ay, Dios mío, cuando hay tanto feto amado
y tantos hombres desmadrados, malnacidos o bien nacidos
que justifican las desgracias o se protegen callando la injusticia!

La virtud, amigos, indudablemente, es la verdad de las realidades.
¿Quién es el valiente que asume sus errores y calla las injusticias?
El mundo tapando sus males, seguro de seguir apabullando.
¡La madre que me parió por ser tan ingenua!

Indudablemente alguien juega con la dignidad ajena
en el amparo y la protección del anonimato o de la técnica,
confiado en la confianza 'virtual' de los medios protectores
y válido por derecho de tomarse una revancha intencionada.
El tiempo no es el que era, es el que se acomoda al valor del trueque,
al molde de la necesidad y consigue camuflarse entre suspiros...
Mañana, los grillos, carecerán de patas para sobarlas en su vientre
y quien tenga ojos debe mirar si las ranas vuelan en lugar de saltar.

Mientras, el camuflaje perfecto se mantiene ocioso en el engañoso ardid
de ser parte de lo que no se ve que fue, sólo por mover ficha...

¿Estamos seguros?
¡Hay mañanas que se despiertan de madrugada
y no por eso padecen de insomnio!
El sol siempre espera con su verdad irisante
escondido entre los párpados de una luna muda.

Elisa
2012