Estáis y se agradece

17/6/12

Exigencia


A mí, me causa gran pena,
ignorar es mucho y más...
Debo añadir que el agras
tampoco a mí me serena.
la turbación y condena
beber a tan palo seco,
ante el garguero reseco
imposición que da el viento
pues soy del verso sediento,
que por sentir lo depreco.

El alma se me retuerce
dando vuelcos por el pecho,
no acepto un todo mal hecho
sin crecer como un alerce...
Estimulando a que esfuerce
o beberme una ilusión,
si pongo mi corazón
y no mi rubor por nada.
Escribiendo doy andada
y se rebaja tensión.

Afán del entendimiento
se nutre lo natural,
mejorando la moral
o engordando pensamiento.
Púlelo su sentimiento,
un ángel o  serafín
y es posible que por fin
escriba con más esmero,
aquéllo que tanto quiero
y sepa de mi [color=cyan]*[/color]barquín.

Discernimiento en caletre
no  [i]chocolate del loro,[/i]
puede que no sea oro
aquéllo que Dios recete.
Si el poema es petimetre
y me elogie y lo presuma
seré del ego con bruma
y mal favor me concedo,
por regalarme algún bledo
del humo que todo ahúma.

... Como sí soy mariposa
cazada en vuelo hábilmente...
Libo con lengua caliente,
poesía por mi rosa.
Una, ... comprende a babosa
sin llevar su caracol...
y como larva en la col
no confunde aperitivo;
[b]¡cuestión del imperativo
mientras aprendes el rol! [/b]

Elisa en su: "Ranita Azul"

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¡Gracias por tu visita! Se sincero siempre no necesitas para ello excederte, sólo estimular a quien lo hace bien. Juzga la labor tanto si es escrita como si es un dibujo o pintura de su autora si la hubiese. Muchas veces entramos a un sitio y no hallamos lo que queremos... Es como quien busca sin suerte y entra en un castillo cuya figura se yergue en el paisaje. Es hermoso ver e imaginar detrás de sus muros lo que hay; pero ya dentro no existe nada y todo ha desaparecido a través del tiempo y se adueña el cacío, están sólo sus muros llenos de tristeza y de sombras, entonces nos queda la imaginación para sentir que cada día mientras esté de pie la luz solar o el firmamento lo llenará de estrellas o de luna de su ayer. A veces somos así algunos seres humanos, como un recuerdo que se escapa dentro de nosotros hacia lo que no existe bajo su techo y sabe permanecer en el corazón de todo universo. Ranita.